Diego Villavicencio se ha profundizado en el mundo del tatuaje como autodidacta, siempre a considerando que la mejor manera de crecer como artista es el tomar muy enserio cada uno de los trabajos y proyectos a realizar, entregando toda su energía creativa en cada trazo realizado, tanto en papel como en la piel. La técnica Free-Hand (dibujar directamente en la piel) es una de sus preferidas, considerando que esta le permite aprovechar al máximo, el lienzo humano y así obtener un resultado dinámico, versátil y muy exclusivo. A partir del 2007 consolida la apertura de su estudio “OKULTO TATTOO” en el centro norte de Quito, con el propósito de crear un espacio único y atentamente decorado, que sirva como el escenario definitivo para vivir la experiencia del tatuaje, obviamente, sujeto a los más estrictos parámetros de higiene y bioseguridad.